Muchos confundimos La Felicidad con una situación ideal en un lugar paradisíaco, sin limitaciones económicas y sin inconvenientes.
Estas cosas son manifestaciones placenteras ideales pero no son La Felicidad.
La vida se conforma por momentos placenteros, momentos neutros y por momentos difíciles.
La Felicidad pasa por todas las situaciones de la vida.
Para poder vivir La Felicidad plena a través de la vida real es necesario pasar por diversas circunstancias.
La Felicidad requiere que sepamos lo que es El Sufrimiento.
El sufrimiento está conformado por momentos dificiles, pero al mismo tiempo es la oportunidad de hacernos más fuertes y valiosos.
Los momentos difíciles son oportunidades de reflexión que nos ayudan a proteger nuestra vida al hacernos crecer para enfrentar las circunstancias.
La Felicidad requiere de Sacrificio.
Todo es el resultado del sacrificio y no llega solo.
No hay forma de llegar a lograr grandes cosas si no nos esforzamos más allá de lo básico y por lo que nos debemos sacrificar, aplicando nuestra libertad por algo que consideramos que vale la pena, el trabajo y el esfuerzo que hacemos.
La Felicidad requiere de Compromiso.
Para cosechar primero hay que sembrar, regar, cuidar y podar. Las Cosechas no se producen de la noche a la mañana y requieren de nuestro compromiso para lograrlas.
El compromiso es llevar a cabo las decisiones que tomamos, con todas las ganas y todas las fuerzas, más allá de las dificultades y las circunstancias.
Para llegar a una meta es necesario comprometernos y accionar con disciplina, sin dejarnos vencer por los caprichos personales, superando nuestras propias limitaciones.
Si no mantenemos nuestros compromisos, no saldremos adelante, ni lograremos ser felices.
No hay forma de tener éxito y felicidad en la vida si no trabajamos duro para conseguirlo.
La Felicidad es saber vivir a través de las realidades de la vida y salir adelante con entusiasmo y Fe.
La Felicidad es apreciar cada instante en el cual podemos aplicar nuestros sentidos para ver lo hermoso que nos rodea, oler un buen aroma, saborear un alimento, escuchar los sonidos de la naturaleza, y tocar a nuestros seres queridos con calidez.
La Felicidad es poder celebrar cada logro, por más pequeño que sea.
La Felicidad es saber recorrer nuestro camino en la vida disfrutando de cada momento en el cual respiramos.
La Felicidad no es una meta, es la experiencia del recorrido.
La Felicidad es una actitud.
Señor, gracias por el privilegio de vivir y de poder superar las circunstancias de nuestra vida con sabiduría, entusiasmo, buena actitud, amor y Fe. Hoy te pedimos que nos des la oportunidad de vencer las dificultades con la capacidad y compromiso que nos impulse a salir adelante.
Que Dios nos bendiga a todos…